PANDEMIA: Las señales del dolor

PANDEMIA: Las señales del dolor

 

Cuando pensamos en la pandemia, inmediatamente nuestros pensamientos giran en torno al virus, el confinamiento, los inconvenientes socios económicos, la escolaridad, el trabajo, etc.

Hoy incursionaremos por el tema desde el interior, es decir, que aspectos de nuestro inconsciente se pusieron de manifiesto porque, si hay algo que nos dejó el confinamiento, es poner al desnudo lo mejor y lo peor de nosotros.

Como tantas veces hemos mencionado en otros posteos, las crisis pueden hundirnos o ser una gran oportunidad para generar cambios positivos y desarrollar nuevos hábitos más saludables tanto para nosotros como para el entorno que nos rodea.

El imprevisto y el miedo nos deja ante patrones mentales que no sabemos de dónde vienen pero que de pronto están allí y los interpretamos como comunes o normales.

De esta forma podemos encontrarnos ante una variedad de reacciones con las que nos podemos identificar en una o en varias de ellas.

1.       Las compras

Si al salir de compras, la primera sensación es de carencia, miedo a la falta, a no tener para el sustento, es probable que estemos tratando de suplir una inseguridad que no podrá ser compensada con el simple hecho de comprar, aunque el adquirir productos genere una falsa sensación de control, lo mismo que le ocurre al comprador compulsivo cuando esta angustiado. Lo significativo es que, aun con la heladera llena y la alacena abarrotada, la inseguridad no desaparece.

Sería interesante revisar en la historia familiar momentos de escases, de perdidas, de momentos donde no hubo para el sustento diario o donde hubo que cambiar el nivel de comodidad. La compra masiva de papel higiénico en el mundo ha sido tan significativa que dio lugar a un estudio donde se concluyó que este último es el motivo de dicha compulsión.

Síntomas: Irritación gástrica, inflamación del hígado

2.       Híper asepsia

Si de pronto me veo excediendo aun las recomendaciones y observo a cada persona que se acerca como una potencial amenaza de contagio, hay un grave miedo a la enfermedad que está directamente relacionado con las experiencias traumáticas que dejaron en la flia otras enfermedades.

 Síntomas: Inflamación de los ganglios

3.       Híper actividad

Son los casos en que la persona no puede estar quieta, se siente atrapada, necesita estar en movimiento constante y lo asocia a la personalidad extrovertida, cuando en realidad es todo lo contrario. Normalmente está relacionado a historias donde quedó atrapada, dificultad en el canal de parto al momento del nacimiento, historias familiares de guerra (falta de libertad) o recibir castigos por medio del encierro.

Síntomas: Dolor muscular, calambres.

4.       El desborde por hacer

Cuando hacer algo quita la sensación de vacío podemos incursionar en conflictos de desvalorización, donde todo lo que hago cobra un valor tan importante que he logrado revalorizarme. Algo que debo sostener ya que durante el confinamiento las actividades cesaron notoriamente.

Síntomas: Malestar en los huesos y articulaciones, contracturas

5.       El trabajo minucioso

Son aquellos que a través del trabajo de forma remota, logran controlar hasta los más mínimos detalles, lo que denota falta de confianza e inseguridad. Se sufre terror a equivocarse y se pretende que el resto haga lo mismo

Síntomas: Dolores de cabeza, musculares y con frecuencia cistitis

6.       Tengo que ayudar en algo!!

Es el síndrome de “Madre Teresa”, son las personas que necesitan hacer, ayudar, aun a costa y riesgo de sus propias vidas, son sacrificados y se olvidan de sus propias necesidades.

Generalmente son personas que se involucran en acciones de voluntariado. El placer lo encuentran solo en dar sin recibir nada y esto denota una gran inseguridad y desconfianza en que aquellos que deben ayudarme o sostenerme no lo hagan

Síntomas: Pueden ser muchos y variados pero los más comunes son la anemia (dejo mi oxígeno para que lo pueda tomar otro) y los dolores musculares

7.       A mí no me va a pasar…

Son aquellos que transgreden las medidas de seguridad e higiene, tienen serios problemas con la autoridad en sus vidas, todo lo ven como un atentado a su libertad. Es un modelo aprendido en la primera infancia previo a los 2 años de vida donde los padres no han sabido delimitar con claridad el SI o el NO en sus vidas.

Síntomas: Dolores cervicales, contracturas en el cuello y hombros

SUGERENCIAS:

·         Confeccionar una lista de cosas en exceso que hayamos hecho durante el último tiempo.

·         Lo que se repite con frecuencia es la pista de lo que necesitamos sanar

·         En esta etapa se manifestó con más profundidad, pero cuando comenzó?

·         Observa las sensaciones corporales que aparezcan al tomar conciencia

·         En los momentos de ansiedad coloca un paño frio sobre la zona frontal

·         Intenta realizar alguna actividad que te permita conectarte con tu interior: escuchar música, yoga, meditación, etc.

·         Bailar y reír son actividades que producen endorfina y las podemos realizar aun si estamos solos

·         Evita la información en exceso (infoxacion)

Bioneurocoaghing es una terapia de acompañamiento.

Todo lo aquí compartido, tiene carácter informativo y no reemplaza las indicaciones o tratamientos que el médico especialista pueda brindar

 

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